La Ermita del Valle


La Ermita del valle - J. Briones -2017
La Ermita del valle - J. Briones -2017

Si alguna vez se nos ocurre leer en el tercer libro apócrifo de “Henoc” o Henoch apócrifo pues no figura entre los libros canónicos mas se le menciona en algunos capítulos tanto de las escrituras hebreas (antiguo testamento) como de las griegas (Nuevo Testamento) y se han encontrado copias anteriores al año 76 en las cuevas de Qunram 

 

Este nos cuenta que su asunción a las alturas fue de tal guisa.

 

“Fui al centro de la tierra vi un lugar bendito y fértil donde se encontraba el árbol de las tres ramas. Al norte frente a él estaba la “Montaña Santa” y al pie de la montaña agua que venía del Oriente y corría hacia el Mediodía. Vi después por el oriente otro monte de frente y entre la montaña y el monte una garganta profunda por la cual corre el agua a lo largo de la montaña.

Al Oeste de la montaña hay otro monte más bajo y por debajo otra montaña profunda entre los dos por donde sale el agua. Y otra garganta y otro monte entre los dos anteriores todos de dura roca. Admiré la roca admiré la garganta y me asombré mucho.“

 

Con un poco que miremos la panorámica de Toledo enseguida nos daremos cuenta de que dicho personaje bíblico parece referirse a esta ciudad pues ella es posiblemente la que tiene más edificios religiosos del mundo. Y que las tres ramas de que habla son las tres culturas nombre que también se da a la la ciudad.

 

Recordemos que a su magnífica catedral gótica la acompañan el Monasterio gótico de S. Juan de los Reyes infinidad de parroquias latinas y mozárabes dieciséis conventos de clausura además de tantas iglesias cristianas los acompañan dos extraordinarias sinagogas hebreas y dos antiguas mezquitas musulmanas más su entramado caserío. Todo esto en tan solo cuatro kilómetros de perímetro. 

 

Uno de los montes al que se refiere es el conjunto megalítico de la Piedra del Rey Moro junto al que hayamos una tumba rupestre excavada en la roca. En su ladera se encuentra la ermita de la famosa Virgen del Valle bajo el camarín de esta se encuentra una cueva con un pequeño lago lacustre

 

Cuenta la leyenda que a mediados del siglo VI en esta cueva vivía un ermitaño que dominaba las artes oscuras continuando enseñanzas y rituales que venían de sus antepasados 

 

Usaba para sus ceremonias un altar dedicado a Baal-CeBu situado en el cercano lugar conocido como cerro del Bu donde desde los antiguos carpetanos se hacían sacrificios humanos. (Donde hasta la reconquista existió la torre conocida como de los diablos). También en la parte baja de este cerro hay una oquedad por donde mana agua que algunos dicen procede del lago subterráneo de la ermita, (el pequeño manantial de agua es real, está cercano al lugar llamado piano lo conozco)

 

A él acudían las gentes de Toledo y sus alrededores para obtener bendiciones en agosto tras las cosechas le llevaban presentes con los que el hechicero bendecía la ciudad. No existían los actuales caminos a la ermita desde el puente romano que conocemos como Alcántara y para llegar a ella Había que subir hasta la sisla y bajar directamente por el monte o se iba dando la vuelta al valle desde san Martín, o por un antiguo puente de barcas situado a los pies de la ermita muchos cruzaban el río a nado por lo que esta tradición se conoció como de los nadadores.

 

El último de los hechiceros perdió la vida cuando preparaba un poción. (La leyenda del último hechicero continuaría hasta llegar al rey Roderico “Rodrigo” pero esta es otra historia)

 

Desaparecido el hechicero las gentes de la ciudad siguieron acercándose al lugar a rendir culto en el altar del bu buscando las bendiciones que antes les daba el desaparecido hechicero Con el tiempo y tratando de cambiar estas tradiciones y rituales y atraer a los moradores la Iglesia católica hizo lo mismo que en otros lugares “absorbió la tradición”. Puso en el lugar de la cueva una ermita cambiando la adoración al Bu con la imagen de una Virgen a la que se continua ofreciendo plantas aromáticas en lugar de las cosechas de antaño 

 

Debido a las inclemencias de agosto y a que mayo se consideró el mes de la virgen, en el siglo XVII se cambió la fecha al uno Mayo. 

 

De este modo la hacían de coincidir con los similares rituales que se hacían desde los tiempos antiguos a la diosa Maya (y la religión católica también absorbía éstos)

 

En el calendario dedicado a las paganas fiestas romanas podemos ver la descripción de esta festividad

 

"1 de Mayo

Los mercaderes ofrecen sus productos a la diosa Maya.

Se celebra en Roma el día de los Lares Tutelares, divinidades protectoras o almas de los antepasados, en cuyas memoria se levanta una capilla en cada uno de los barrios. Es la fiesta con la que comienza la gran actividad humana, de ahí que se haya transformado en fiesta del Trabajo. Se enciende el fuego nuevo y la llama encendida de testimonio de cómo la vida puede surgir de la muerte. Estas celebraciones se realizan en las cimas de las montañas. Luego se come un pan dulce con huevo."

 

En Toledo se continuó realizando la tradición de celebrar fiesta en Agosto, y por ello también desde el siglo XVII en Agosto se sigue celebrando la llamada fiesta grande de Toledo.

 

Y al lugar de la antigua cueva siguen acudiendo los toledanos ignorando que están realizando el mismo culto que el desaparecido hechicero, Con tantos adoradores como hay en esta ciudad en que todas las religiones se dan cita, Una ciudad de las pocas del mundo en que en las paredes de sus templos principales se encuentra escrito el nombre de Dios, no podía faltar el culto al opositor de Dios conocido como Diablo, Satanás o Belcebu (Baal-CeBu).

 

Oseas 13:1 dice “1 Al hablar Efraín hubo temblor; él mismo llevó peso en Israel. Pero procedió a hacerse culpable respecto a Baal y morir. 2 Y ahora cometen pecado adicional y se hacen una estatua fundida de su plata ídolos según su propio entendimiento obra de artífices todo ello. A ellos les dicen: ‘Que los sacrificadores que son hombres besen a simples becerros’ "

 

Quien tenga oídos escuche y quien tenga entendimiento entienda.